A veces no es una decisión sencilla, pero la esterilización es la única solución viable para el grave problema de sobrepoblación animal, evitando que cada día decenas de animales sean cruelmente abandonados y atropellados, enfrentándose diariamente a la enfermedad, el hambre y la indiferencia.
Existen conceptos equivocados sobre la sexualidad y reproducción de los perros y gatos en nuestra sociedad, esta falta de información lleva a la reproducción innecesaria de las mascotas y al mismo tiempo a la sobrepoblación.
La esterilización es un método quirúrgico que ayuda a evitar en forma eficaz, segura y al 100% la reproducción indiscriminada o no deseada de una perra o un perro. Sin olvidar que también es el método más acertado para evitar que algunas enfermedades hereditarias en los perros continúen propagándose.
Desgraciadamente existen demasiadas falsedades y mitos que no benefician a la toma de decisión de llevar a cabo está práctica, tales como, la creencia de que las perras debían tener cachorros antes de ser esterilizadas. Esto es sólo una consecuencia trasladada de los seres humanos, puesto que antes se creía que las mujeres debían tener un hijo antes de ser operadas para evitar el cáncer uterino o de seno. Actualmente los estudios en medicina humana han demostrado que esto es falso. O la idea de que los trastornos hormonales y de masculinización se sufren en las mujeres cuando al ser operadas se les extrae completamente los ovarios. En las perras esto no ocurre, ni sufren alteraciones hormonales ni se vuelven machos.
Los machos no se van a convertir en afeminados, simplemente se van a volver más tranquilos y optarán por una vida más sedentaria, no tendrán la necesidad de escaparse de casa ni pelearse con otros perros por reproducirse.